Si los elefantes son capaces de reconocer a sus muertos, algo hemos hecho mal. Cuánto trabajo, cuántas horas, cuánto dolor para al final darnos cuenta de nuestro profundo malentendido de lo que significa la palabra vida.
Si los elefantes son capaces de reconocer a sus muertos, algo hemos hecho mal. Cuánto trabajo, cuántas horas, cuánto dolor para al final darnos cuenta de nuestro profundo malentendido de lo que significa la palabra vida.